viernes, 29 de octubre de 2010

29/10/10





A) Odiaba las muestras falsas de cariño, odiaba tener que decirle a la gente "te quiero" solo por compromiso, odiaba tanto tener que abrazar a alguien a quien normalmente ni le hablaba. No soportaba que la obligaran a hacer esas cosas, no le gustaba mentir de esa manera ¿por qué tenía que decirle a una persona con la que nunca hablaba que la quería? A ella no le afectaba que las personas en la calle no la quisieran ¿qué acaso a esas personas si les importaba que ella las estimara? Que va, si ella no era mas que un humano mas, no tenía nada especial para ellos, ¿entonces que tenía de malo que no les dijera que los quería?






B) Había salido temprano de la escuela, iba sentada en el autobús mirando por la ventana e imaginando que iba en una especie de submarino y que lo que veía no eran los terrenos baldíos de siempre, sino el lugar donde habitaban peces de colores y quizá ¿por qué no? hasta alguna sirena. Imaginaba que en cualquier momento se encontraría un cofre del tesoro pero tendría que dejarlo ahí porque no podía respirar bajo el agua. Así le gustaba perderse en su mundo, mirando el cielo, la gente, los reflejos, las sombras, las formas... Tantas cosas... ¿Cómo podía todo ese mar de gente ignorar tanta belleza? Porque cada una de esas cosas estaba hecha de un montón de cositas diminutas que eran las que, al estar todas en montón, le daban esos colores, esas texturas, esos olores y sabores a las cosas.

1 comentario:

Lenny (sin Carl) dijo...

Cuanta razón tiene el A, cuanta razón.